martes, 9 de julio de 2013

Industria automotriz muestra el peor desempeño desde 2003


La industria automotriz atraviesa uno de sus peores momentos. En el primer semestre apenas se ensamblaron 36.919 vehículos, un 36,39% menos que en 2012, según reportó la Cámara Automotriz de Venezuela (Cavenez). Al poner en perspectiva el rendimiento del sector se observa la difícil realidad que viven las siete ensambladoras privadas instaladas en el país. El resultado del primer semestre es el peor desde hace diez años. Para encontrar una cifra más baja hay que retroceder hasta el primer semestre de 2003, cuando las automotrices sólo armaron 14.088 unidades. Ese año la economía aún sentía los efectos del paro petrolero, iniciado a finales de 2002.
Ahora sufren una limitada asignación de divisas y demoras en el pago de los dólares, lo cual ha colocado a las empresas a trabajar a un ritmo muy inferior al de su capacidad instalada. Algunas plantas han considerado, incluso, ensamblar sólo tres días a la semana y dedicar los otros dos a entrenamiento del personal para "dosificar" el inventario de material de ensamblaje. El Banco Central de Venezuela (BCV) ya había reportado una caída de 44,9% en la producción de vehículos del primer trimestre, de acuerdo al comportamiento del Producto Interno Bruto (PIB). El propio Nelson Merentes, ministro de Finanzas, reconoció recientemente que el sector automotor es uno de los más perjudicados por el retraso en la liquidación de los dólares. Al detallar el boletín mensual se observa que cinco de las siete ensambladoras agremiadas en Cavenez frenaron su ritmo de producción en junio. Además se aprecia cómo las plantas han tenido que disminuir el ensamblaje de los vehículos más demandados por la población. Por ejemplo, General Motors Venezolana (GMV) sólo armó 907 unidades del Chevrolet Aveo. En abril la empresa pudo producir hasta 1.527 unidades. A este ritmo de producción los consumidores deben esperar meses para poder adquirir el auto. Una situación similar ocurre con el ensamblaje del Fiesta. En junio Ford Motor de Venezuela apenas sacó 51 unidades de este modelo, pero en abril había armado 952. Esta semana la filial venezolana de Ford emitió un comunicado de prensa en el que explicaba que la empresa trabaja con las autoridades "para encontrar soluciones a los problemas que hoy nos impiden maximizar la producción". Además la compañía advertía que el proyecto de Ley que regula la compra y venta de vehículos automotores nuevos y usados "no atiende las causas ni el problema" existente en el mercado, que es la falta de oferta. Los diputados del PSUV han desechado este argumento e insisten en que la distorsión de precios de los automóviles obedece a la existencia de "mafias" en el sector automotor. El largo declive Si en el segundo semestre del año se mantiene la tendencia del primero, la producción de las ensambladoras privadas no superará las 80 mil unidades, lo cual acentuaría el declive que la industria inició en 2008. Según las cifras de Cavenez, entre 2007 y 2012 el ensamblaje de carros retrocedió 39,6% al descender de las 172.418 unidades a tan sólo 104.083. La Cámara de Fabricantes Venezolanos de Productos Automotores (Favenpa) alertó esta semana que, en el mejor de los casos, la producción llegará a 80 mil unidades este año. "Los programas de las ensambladoras para los próximos meses son muy bajos", admitió José Luis Hernández, presidente de Favenpa. Tomado de El Universal.

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