En 21,6% se calcula la escasez general de alimentos

“No hace falta que entre en vigencia o ser un visionario para conocer las consecuencias que traerá la puesta en marcha de la Ley de Costos y Precios Justos, pues la experiencia lo dice todo. Ocho años llevan los controles de precios en el país y éstos sólo han traído más inflación y desabastecimiento”. Así lo ve Pablo Baraybar, presidente de la Cámara Venezolana de la Industria de Alimentos (Cavidea), quien recordó que desde el año 2003 hasta la fecha la escasez de alimentos promedia entre 15 y 20 por ciento, hecho que genera preocupación en el sector, pues se demuestra que hay “un problema estructural”.
Otros casos son más exagerados como lo es el aceite que escasea alrededor del 60 ó 70 por ciento. Además, el control de precios tiene otra cara, “ha generado especulación” en la economía informal donde se vende con sobreprecio. Un ejemplo lo dan tres rubros: la harina de trigo que se consigue en Bs. 40,2, la leche en polvo en Bs. 60,7 y el aceite de mezcla en Bs. 69,1. “Al no encontrarse en los mercados, los consumidores acuden al sector informal donde los productos se venden con 40 ó 50 por ciento de sobreprecio”. Tampoco la estrategia gubernamental de controlar los precios de los alimentos ha asegurado la soberanía alimentaria, pues desde que se aplica, hasta el año 2010, las importaciones crecieron de dos mil millones de bolívares a trece mil millones. Una razón adicional que conllevó a que Cavidea rechace que se considere controlar los precios de los alimentos, es que durante los últimos años, los costos de los rubros regulados reciben ajustes que resultan insuficientes para cubrir sus costos de producción. “La materia prima sube más que los precios de venta al público, lo cual no genera rentabilidad”. Si a la importancia que tiene el Reglamento sobre la Ley de Costos que se discute en el Ministerio de Comercio, se le suma que Cavidea no ha sido llamada aún para incorporarse a las mesas técnicas, ni han tenido acceso a la propuesta, esto genera preocupación por el efecto que traerá la ley en el sector. Soluciones hay Para Baraybar, la solución se basa en expandir la producción nacional, por lo que considera prioritario sincerar los precios de acuerdo a las estructuras de costos presentadas por la industria, hacer las revisiones pertinentes y llegar a los acuerdos para corregir los rezagos. También propuso que el Gobierno se encargue de comprar la materia prima necesaria y venderla al sector con precios que permitan tener rentabilidad. Ventas En un informe suministrado por Cavidea se detalla que las ventas en su mayoría descendieron en agosto pasado respecto al mismo mes de 2010, tal es el caso del arroz que cayó en 7,50%, harina de trigo en 5,48%, pastas en 8,23%, leche en polvo en 11,63%, sardinas en 8,83%, atún en 1,62%, embutidos en 1,28%, aceites en 23,69% y margarina en 13,01%. Otros reportaron crecimientos en sus ventas, como: la harina de maíz en 14,26%, avena en 8,87%, mayonesa en 5,22% y salsa de tomate en 24,12%.